OH BOY

Título original:  Oh Boy

Año:  2012

País:  Alemania

Director: Jan Ole Gerster

Guión: Jan Ole Gerster

Reparto:

Tom Schilling, Marc Hosemann, Friederike Kempter, Justus von Dohnányi, Michael Gwisdek, Katharina Schüttler, Arnd Klawitter, Martin Brambach, Andreas Schröders, Ulrich Noethen, Frederick Lau, Steffen C. Jürgens

Género

Comedia. Drama | Comedia dramática. Drama social

Premios del cine alemán como mejor película, director, guion, actor y banda sonora

Niko Fischer soñador treintañero, antihéroe, nada culmina, La novia se ha cansado de su desidia y pereza, el padre lo ningunea y el psicólogo acaba de declararle emocionalmente inestable.

Durante todo ese día que dura la película no logra tomar una mísera taza de café con la que sustituir ese alcohol que antes ahogaba sus miedos.

No tiene una vida hecha ni oficio ni beneficio, hace dos años ha dejado los estudios y vive del apoyo económico paterno que ha cesado en este día que el padre descubre su engaño. Quiere encontrar su lugar en este mundo y se dedica a vagabundear por un Berlín en blanco y negro. Jamás vivirá Niko unas veinticuatro horas tan ajetreadas, de lugar en lugar, de encuentro en encuentro, de circunstancia ajena en circunstancia ajena que si bien  le dice que su vida necesita un cambio también le dice que  en su entorno hay muchas vidas  supuestamente hechas que están desquebrajadas.

Su nobleza es lo único que tiene y lo que lo lleva a  iniciar esa búsqueda de un cambio en su vida un cambio que plantea pensando finalmente frente a una taza de café en no semejarse a entorno que probablemente lo mimetizará.

Una película sin duda que obliga a pensar en las crisis de la vida, en el aburrimiento, el hastío y el no saberse estar en un mundo que pareciera hecho para otros. Un día de reflexión, un día para detenerse y retomar el camino o cambiar de dirección, un día  de nuestras vidas en que la decisión  no sólo requiere valor y empuje sino el enfrentarse a uno mismo y dejar la lucha atrás.

                                                                                              Eduardo  Sastrías