EL ENGAÑO DE LAS REDES SOCIALES

Si bien las redes sociales han detonado una innovadora fuerza pública también han desatado un nuevo fenómeno al  rebasar la tenue línea de lo privado, al perderse esa frontera entre lo público y lo privado, la individualidad se ha visto amenazada.  Cualquier frase, pensamiento, “slogan”, ocurrencia, es inmediatamente  compartido ene veces hasta volverse una verdad absoluta, aquí aplica que tanto se dice una mentira hasta que es creída.

La opinión de la mayoría es hoy en día la que impera aun cuando sea totalmente errónea y falta de sustento. Hemos retrocedido al siglo XVI de Galileo usando las herramientas del siglo XXI del FACEBOOK, lo cual nos demuestra la  ENORME brecha que existe hoy entre TECNOLOGÍA y CONOCIMIENTO.

Es la época del reciclaje, del “fast food” el pensar se ha convertido también el “fast think”  que es una combinación de ambos  se traga algo que se da por pensado y se eructa con mayor intensidad.

Pensar, ser, decir, insertar algo diferente puede incomodar a la comunidad por lo que  la regla implícita del juego es  “ser dócil”, “positivo ante y sobre todo”, “no discernir”, “ante cualquier imagen expuesta que presente la “creación” de alguien  sin importar la falta de estética, originalidad y sentido de belleza, habrá que usar la hipocresía a sus más altos niveles, la verdad es hoy más que nunca le peor de las ofensas.

Es así que el engaño de las redes sociales reside precisamente en la idea de “expresarse libremente”  con el temor de ser rechazado, bloqueado, anulado y exterminado. No se necesita ningún aparato mediático, político o de coerción para el pensamiento crítico, la misma dinámica lo anulará, resulta así que este tipo de “redes” suelen “enredar”  y no evolucionar. El pensamiento por lo tanto no encontrará ahí su verdadero eco ni el cauce de su luz, sino se perderá con asombrosa ligereza en el más negro de sus destinos.

                                                     Eduardo Sastrías 

CÓMO ME DUELES MÉXICO

Veo los debates de los diputados sobre la reforma hacendaria y me da la impresión que en un tianguis hay mejor comportamiento, razón de diálogo y negociación. Veo con tristeza que este país es sólo el reflejo de un pueblo sumido en una especie de depresión que se ha vertido en la adicción al valemadrismo, al las telenovelas y al fútbol. Un pueblo de niños que generan niños y que se reproducen exponencialmente en número no en calidad produciendo niños de la calle, olvidados y rescatados por el crimen organizado, con un gran costo social, político y económico que se traduce en impuestos. Veo unos encumbrados senadores que ven al México que representan como quien ve a lo lejos un bello planeta en el sistema solar pero que no saben si siquiera es habitable. Una clase media cada vez más mediocre queriéndose parecer a la clase alta en su lenguaje, en sus marcas , en conductas y cayendo cada día más en la pobreza, patéticamente ha perdido su condición de clase media y al negarse a sí misma ha perdido el por qué de su existencia, dando paso a un país que si bien antes era diverso y lleno de diversos colores hoy es patético y oscuro. Un país de unos miles de ricos y una masa que los idolatra. Las Reformas no son sino la consecuencia de una moral perdida basada en el tener y no en el ser. Ante tanta desfachatez, corrupción , inseguridad, robo de todo tipo desde el más vulgar hasta el más encumbrado de cuello blanco, represión (familiar, sí en la familia comienza la represión , social y política) me siento impotente e igualmente patético querer cambiar esta país tecleando en las redes sociales, cuando los mismos jóvenes son excluyentes,( me consta su actitud y conducta hacia quienes ya no lo somos) así es, hablemos claro, en su gran energía e ideas reclaman a su conveniencia, sabiendo que son motivo y pretexto populista de quienes dicen mandar en este país. Veo así con tristeza que a cierta edad y condición no se encuentra eco ni una manera, por lo pronto, más efectiva de hacer algo por este país, que también tiene requisitos de edad y condición, un país que no respeta la diversidad, porque la ha convertido en una gran masa de pobreza y de hambre, un barco que se hunde y entonces "mujeres y niños primero", aunque sus carteles y slogans digan lo contrario, ¿los demás no tendremos más remedio que esperar que el agua nos colme y nos ahogue? México cómo me dueles.

                                                         Eduardo Sastrías 

SUTIL

Hay una línea muy delicada

que baja por la llanura de tu espalda

camina, se detiene y te seduce

como las manos de mis ojos

inflamados por un roce.

Vaga entre la pasión y el amor

entre la fantasía y la locura

entre  un tú  y un  yo

entre un aquí y un allá

todo lo abre con finura.

Una línea sutil que revienta

en el deseo y la masturbación

de dos cuerpos desnudos  llenos de pasión

almas solas divididas por el miedo que inventa.

Hay una línea pícara, pícara

que rompe  la paz  de mi vida rara

cuando se dibuja en tu sonrisa

me desprende  de todo sin prisa

me invita a tocar el horizonte  deseado,

y ya sin ropa, en el tiempo, me tiene atrapado.

                                                    Eduardo Sastrías